Partes de un trabajo



Un trabajo académico debe tener la siguiente estructura:


  • Portada: debe contener el título (comprensible, claro, preciso y representativo del trabajo), nombre del autor y grupo, nombre del profesor, fecha de entrega.


  • Índice: debe contener todas las partes del trabajo. Se puede hacer un primer índice provisional que se irá modificando a medida que el trabajo avanza. El índice final irá paginado.


  • Introducción: en ella se expondrán los objetivos, especificando el ámbito, el alcance y los límites de la investigación; se realizará una breve descripción de los capítulos, con la metodología empleada y se expondrá la principal conclusión alcanzada; pueden añadirse los agradecimientos.


  • Desarrollo del tema: organizado en capítulos o apartados.


  • Conclusiones: se expondrán con una redacción clara. Se pueden resaltar resultados positivos, negativos, cuestiones pendientes, etc.


  • Referencias consultadas: siempre se deben poner todas las fuentes que se han consultado, no solo por motivos éticos, sino porque además reforzarán los argumentos expuestos. "Los plagios se producen cuando el autor hace pasar ideas, palabras o información de otra fuente como si fueran propias omitiendo expresamente la referencia a su autoría verdadera" [1].


  • Anexos: contienen información que no es relevante para el desarrollo del trabajo, pero lo complementan. Por ejemplo: tablas, fotos, etc.


[1] NUBIOLA, Javier. El taller de la filosofía. Pamplona: EUNSA, 2006.

Última modificación: martes, 25 de junio de 2013, 09:36