Conclusiones y autoevaluación

Las siguientes preguntas remiten a los fragmentos propuestos para la introducción. Su propósito no es señalar información que debería ser aprehendida de memoria sino dar una serie una serie de opciones entre las cuales podemos reconocer algunas de las reflexiones o situaciones señaladas por las autoras leídas. Una relectura rápida de los fragmentos seleccionados aclarará cualquier confusión. 

1) En su texto, Amelia Valcárcel señala la presencia de cuatro condiciones que, en su opinión, podrían explicar el surgimiento del feminismo, ¿puedes reconocerlas en la siguiente lista?
  1. Un grupo de mujeres combativas en los inicios del siglo XX
  2. Una teoría que señala lo que es relevante y cómo ha de ser interpretado el mundo
  3. Una agenda que indica lo que hay que hacer
  4. La divulgación de las tesis feministas en la academia contemporánea
  5. Un movimiento comprometido con la agenda 
  6. Un conjunto de acciones, como consecuencias laterales, no especialmente dirigidas o solo parcialmente dirigidas
  7. La publicación de obras feministas en ediciones accesibles
  8. La dominación masculina en la política contemporánea

Reflexionar sobre las condiciones que explican el surgimiento del feminismo es importante no solo para hacer justicia a la historia sino para imaginar las condiciones que podrían revitalizarlo hoy. Por ejemplo, mujeres combativas han habido en el pasado y no faltan –afortunadamente– en el presente, pero la combatividad no es nunca neutra, y así como es necesaria, es indispensable que esté fundamentada en ideas contrastadas, en la historia, en una lectura honesta de los propios tiempos, etc., para que tenga sentido. Es fundamental, pues, una teoría, en su sentido de una posición que señale, efectivamente, lo que es relevante, y no solo eso, sino que anticipe una vía para transformar la realidad que interpreta, es decir, que tenga una agenda y un movimiento de personas que la lleve adelante.

2) ¿Puedes reconocer dos obras del periodo barroco-Ilustración que podrían considerarse antecedentes del surgimiento del feminismo en Europa?

  • Emilio, o de la educación, de Jean Jacques Rousseau
  • De la igualdad de los sexos, de Poulain de la Barre 
  • Vindicación de los Derechos de la Mujer, de Mary Wollstonecraft
  • El espíritu de las leyes, del barón de Montesquieu 
  • El tratado del hombre, de René Descartes

Uno de los rasgos de la generación de A. Valcárcel es haber sabido valorar el antecedente ilustrado del feminismo, no solo en la obra de Mary Wollstonecraft, un hito ampliamente reconocido, sino en otros autores, como Poulain de la Barre, cuya sensibilidad es digna de aprecio, toda vez que se da en un contexto donde la subordinación de la mujer estaba totalmente naturalizada, tal como pueden mostrar las diferencias entre Emilio y Sofía en la obra de Rousseau.

3) ¿Cómo define en su texto M. Wollstonecraft el afecto paternal?

a) Como una condición necesaria para el crecimiento emocional de los hijos
b) Como la modificación más ciega del egoísmo perverso
c) Como el cariño que padres y madres prodigan a sus vástagos

Parece demasiado duro que M. Wollstonecraft se refiera al afecto paternal como modificación ciega de un egoísmo perverso que, en parte, es el egoísmo de querer ver al hijo en lo más alto. ¿Qué padre no quiere lo mejor para su hijo?, podría decirse, y para esto deben hacerse algunos sacrificios. En este breve fragmento, Wollstonecraft consigue relacionar en muy pocas líneas esta especie de ambición paternal con la debilidad del ejercicio del poder; por eso he dicho antes padre (y no padres o padre y madre) e hijo (y no hijos o hijos e hijas). El padre (que también puede ser una madre, claro, como también apunta la autora, pero que la mayoría de las veces resulta que es varón), ejerce en el espacio doméstico el lugar que tiene el soberano en el Estado, y en la misma línea de pensamiento, el tirano o el dictador. Es el dominio de este lugar de poder lo que –realmente– explica los sacrificios a los que se somete al hijo, futuro continuador de esta particular saga. En el siguiente bloque continuaremos esta línea de reflexión.

 

Para seguir pensando

El Seminario Permanente Feminismo e Ilustración, creado en 1987 por Celia Amorós en la Universidad Complutense de Madrid, es una contribución muy valiosa de la filosofía española a la reflexión feminista. Las autoras que desde entonces han pertenecido a este grupo han producido una reflexión consistente y han formado a varias generaciones tanto de mujeres como de hombres.

La orientación del llamado feminismo ilustrado no agota, desde luego, las posibilidades de acercamiento a la transformación feminista, pero atina en valorar su antecedente moderno, aportando claves para analizar y entender la cara moderna del patriarcado, por lo demás, una versión con un alcance tan amplio en la cultura como otros rasgos heredados del siglo de las luces. Se trata de una genealogía que se puede o no compartir, pero que estamos obligadas a conocer en una España en la que persisten sus efectos.

Indispensable, pues, el libro de Marta Madruga, producto de su investigación doctoral en la Universidad de Valladolid en 2018 dirigida por Alicia Puleo y publicada en la colección Feminismos de la editorial Cátedra. 



Licencia de Creative Commons
Licencia Creative Commons Reconocimiento-NoComercial-CompartirIgual 4.0 Internacional

Última modificación: viernes, 20 de noviembre de 2020, 11:55